En una fusión única de arte contemporáneo, moda vanguardista y una pizca de humor atrevido, Loewe, bajo la dirección creativa de Jonathan Anderson, dejó una marca indeleble en la Semana de la Moda Masculina de París para la temporada Otoño/Invierno 2024.
La presentación de la colección masculina de la renombrada casa de moda española se llevó a cabo bajo la atenta mirada de grandes cuadros digitales del artista Richard Hawkins, que sirvieron como el telón de fondo perfecto para una reflexión profunda sobre la sociedad actual y la obsesión por la celebridad.
En un giro audaz, modelos masculinos desfilaron por la pasarela ataviados con vestidos de piel que se cerraban con enormes lazos y trajes cuyas terminaciones se embutían dentro de los calcetines. La provocación y el ingenio de Anderson se manifestaron en cada detalle, desafiando las convenciones de la moda masculina con una mezcla irreverente de elementos clásicos y contemporáneos.
En este desfile que fusiona el arte visual con la moda, Loewe continuó con su tradición de atraer a grandes estrellas de la música y el cine. Entre la multitud, destacaban nombres de la talla de Andrew Garfield, conocido por su papel en «Spiderman», y Nicholas Braun, reconocido por su participación en la exitosa serie «Sucesión». La presencia de estas celebridades subrayó la capacidad de Loewe para trascender las fronteras entre la moda y el entretenimiento, consolidándose como una fuerza influyente en ambos ámbitos.
La paleta de colores utilizada en la colección abarcó desde el negro azabache de los espectaculares abrigos de cuero hasta el amarillo limón de los pantalones de pitillo, pasando por el verde pistacho de los jerséis abombados. Esta diversidad cromática no solo resaltó la habilidad técnica de los diseñadores, sino que también expresó la multiplicidad de matices presentes en la sociedad contemporánea.
En un comunicado de prensa, la casa de moda explicó el concepto detrás de la colección, señalando que las prendas de ropa están «unidas unas a otras: zapatos a calcetines, calcetines a pantalones, pantalones a chaqueta o abrigo, cinturón a la cintura». Este enfoque simboliza un intento sardónico de imponer, en lugar de proponer, una mirada, reflejando de manera mordaz la realidad collage en la que todos vivimos.
Loewe, con su audaz combinación de moda y arte, no solo desafió las normas establecidas en la industria, sino que también ofreció una mirada incisiva a la sociedad contemporánea y su obsesión con la celebridad. El desfile no solo fue una exhibición de prendas innovadoras, sino también una experiencia artística que capturó la atención y la imaginación de todos los presentes en la Semana de la Moda de París.