Charli XCX convierte Coachella 2025 en una fiesta de estrellas
El primer fin de semana de Coachella 2025 nos dejó momentos para el recuerdo, y uno de los más vibrantes tuvo como protagonista a Charli XCX. La artista británica no solo brilló con su poderoso directo, sino que además convirtió su show en una auténtica celebración repleta de invitados de primer nivel, dejando claro por qué sigue siendo una de las figuras más vanguardistas del pop actual.
Un espectáculo cargado de sorpresas
Charli XCX subió al escenario principal con la energía desbordante que la caracteriza. Su setlist combinó éxitos recientes con himnos de su carrera, todo envuelto en una estética futurista que hipnotizó a la audiencia. Pero lo que realmente elevó su actuación a otro nivel fueron las sorpresas que tenía preparadas.
Billie Eilish: una colaboración de alto voltaje
El primer gran momento llegó cuando Billie Eilish apareció inesperadamente para interpretar junto a Charli el tema Von dutch. La complicidad entre ambas fue evidente, encendiendo a la multitud en uno de los duetos más comentados del festival. La mezcla de las voces de Charli y Billie, sumada a la euforia del público, creó un instante mágico que rápidamente se volvió viral en redes.
Lorde y Troye Sivan: una celebración del pop alternativo
Las sorpresas no terminaron ahí. Minutos más tarde, Lorde se unió a Charli en el escenario para interpretar una versión especial de 365, desatando la emoción de los asistentes. La cantante neozelandesa, conocida por su estilo introspectivo, encontró en Charli el equilibrio perfecto para una presentación intensa y emocional.
Finalmente, Troye Sivan completó el trío de estrellas invitadas. Juntos, ofrecieron una interpretación vibrante de 1999, uno de los temas más icónicos de Charli XCX. El carisma de Troye y la actitud desenfadada de Charli crearon uno de los momentos más coreados de la noche.
Una declaración de intenciones
Más que una actuación, el paso de Charli XCX por Coachella fue una auténtica declaración de intenciones: el pop puede ser experimental, colaborativo y profundamente emocionante. Su capacidad para reunir a algunas de las figuras más relevantes del panorama musical actual confirma su influencia y su instinto infalible para capturar el espíritu de su generación.
Charli XCX no solo ofreció uno de los shows más memorables del primer fin de semana, sino que también demostró que, en un festival donde todo es posible, ella sigue siendo la que marca la diferencia.