El Renacimiento de la Cultura Rave: Cómo la Estética Club Vuelve a la Moda en la Escena Social en 2023
El origen de la cultura rave sigue siendo un tema de debate entre los estudiosos y los aficionados a la música electrónica. Algunos afirman que las raves se originaron en Estados Unidos, específicamente en Detroit, mientras que otros apuntan al Reino Unido de los años 80 como el caldo primigenio de esta subcultura. Sin embargo, lo que es innegable es que en los últimos años ha habido un auge en el consumo de música electrónica y un creciente interés por la cultura que la rodea.
Una señal clara de este auge es el informe de Pinterest para el año 2023, que predice que la cultura y la moda rave serán tendencia este año. Con la Generación Z y los Millennials buscando recuperarse de más de dos años de confinamiento, se espera un aumento en la asistencia a clubes nocturnos, raves en naves y fiestas en casas en todo el mundo. Las búsquedas de estilos como el techno, la moda rave de Berlín y la música house están en aumento, según el informe.
En el mundo de la moda, algunas marcas han creado su universo en base a la estética rave. Raf Simons, el diseñador, despidió su marca homónima con un espectáculo que combinaba un desfile de moda con una rave. Después del show, Simons se sumergió en la multitud, la música volvió a sonar y todos continuaron bailando. Otras marcas de nueva generación como Charles Jeffrey Loverboy o Jordanluca también hacen de su amor por la cultura club su ventaja competitiva. En los últimos cinco años, la estética club ha inundado las pasarelas de marcas como Givenchy, AMBUSH, Versace e incluso Dior, incorporando este sentimiento nostálgico del clubbing en sus propuestas.
Los hermanos Gvasalia, nacidos en Europa del Este, han sido considerados como los padres de la nueva estética rave en la moda. La subcultura rave de Europa del Este ha influido mucho en las colecciones de Vetements y Balenciaga, y en consecuencia en el estilo de la nueva generación de club kids y seguidores de tendencias.
El este y el norte de Europa han experimentado un crecimiento en la calidad artística y han desarrollado una fuerte escena de moda, que se acompaña del éxito en el panorama musical. Marcas como Hoda Kova, AVAVAV, MISBHV o Namilia se mueven en esta estética que rechaza lo puramente bello, utilizando elementos subyacentes de las raves e inspirándose en la cultura pop del momento.
Una marca que ha adoptado ampliamente la estética rave en la moda es Diesel, dirigida creativamente por Glenn Martens. La marca se sumerge en la cultura club para mostrar una sensualidad grunge propia de estas fiestas clandestinas.
Sin embargo, algunos críticos sostienen que la estética rave ha perdido su carácter contracultural y se ha convertido en una tendencia al servicio del mercado. Lo que en su momento fue una subcultura underground que desafiaba las normas sociales y comerciales, ahora forma parte del mapa de la moda y se ha integrado en el sistema capitalista y las dinámicas sociales actuales.